La creatividad comienza fuera del briefing
17/12/2019
Por Fran Jiménez. Director Creativo de Staff Global Group

Es muy “cómodo” leer un briefing y responder a los objetivos que nos plantea un cliente pero… ¿Y si buscamos una alternativa para llegar a esa solución? Aquí es donde nosotros intentamos diferenciarnos, en la forma creativa en la que afrontamos cada proyecto desde el inicio.
Cuando hablamos de creatividad fuera del briefing, nos referimos a pensar más allá de él, a cuestionarnos incluso el propio briefing… ¿Y si lo que necesita nuestro cliente no es lo que nos está pidiendo exactamente?
Evidentemente, el cliente conoce mejor que nadie tanto los problemas a los que se enfrenta como los objetivos que necesita alcanzar para seguir mejorando su marca o producto, pero debemos entender el briefing como una guía, como una herramienta de apoyo creativo que nos nutra y que nos inspire, pero nunca como una limitación.
Pongo como ejemplo un briefing que recibimos no hace mucho tiempo por uno de nuestros clientes. En él, nos pedía un evento de lanzamiento al que invitaría a su público objetivo para dar a conocer su nuevo producto. Es entonces cuando nos pusimos a pensar en el concepto, el storytelling, una escenografía de infarto, la mejor comida… en resumen, una experiencia para los 5 sentidos. Creedme, ¡iba a ser un eventazo! Pero entonces, de repente, pensamos ¿y el producto? Nos dimos cuenta de que debido a la complejidad del producto habíamos creado un gran evento, pero no la mejor solución para este caso. El cliente tenía que mostrar su producto pero realmente no necesitaba un gran evento de lanzamiento, necesitaba que el público conociera, sintiera y tocara su producto. Y de ahí partió nuestra solución, no dimos al cliente el evento en sí que nos solicitaba en el briefing pero sí la solución que realmente nos estaba pidiendo y que necesitaba (permitidme que me guarde el secreto de lo que hicimos).
En definitiva, nos marcamos un objetivo claro antes de cada briefing, no queremos que el cliente nos vea como un simple proveedor en su comunicación, sino como un “compañero de viaje” que siente la marca como suya y que no tenga miedo a decirle en algunos casos que lo que necesita es… otra cosa.